martes, 30 de noviembre de 2010

El torneidou (II)


El otro día, aprovechando que estábamos por la zona, fuimos a ver los estragos causados por el tornado a su paso por los alrededores de Rockford.


Las imágenes hablan por sí mismas. Aquí arriba tenéis lo que fue parte de la puerta de un garaje en la copa de un árbol.
Sin embargo, lo que más nos impresionó fue ver casas bastante tocadas al lado de otras que no habían sufrido ningún daño, o incluso una cocina "desaparecida" mientras el salón y los dormitorios adyacentes estaban como si nada hubiera pasado.


En teoría, la temporada de tornados estaba prácticamente terminada, pero bueno, parece que no es muy matemática la cosa.

martes, 23 de noviembre de 2010

El torneidou

A pesar de no estar en la época más propicia, ayer se formaron varios tornados en la zona norte de Illinois y sur de Wisconsin. Uno de ellos se acercó peligrosamente a Rockford y se cargó varias casas de un pueblecito de aquí al lado llamado Caledonia, aparte de levantar y después volcar un autobús escolar. Este es un vídeo grabado por un vecino de la zona:




Lo que se oye en plan sirena antiaérea es eso, una sirena para alertar del tornado. A mí me pilló en el cole, y por aquella zona no se notó mucho el viento, pero a Marta la pilló de camino a buscar a los niños y ella vio ramas volando -y no precisamente palillos. Al llegar a la guardería de Pedro estaban metiendo a todo el mundo dentro de los baños, y allí se tuvieron que quedar un buen rato. Ya os podéis imaginar, un montón de niños llorando, las profes cantando "The wheels on the bus" para que se tranquilizaran...

Y a todo esto, la tía Bea y su amigo Coya, aquí en casa, como si nada.

lunes, 15 de noviembre de 2010

Grossology


Según el diccionario Oxford, si algo es gross es asqueroso (entre otras cosas, pero vamos a quedarnos con esta).
La mayor parte de las veces los americanos son muy comedidos para hablar de las cosas soeces que tienen que ver con lo corporal. Otras veces, en cambio, son capaces de dejarse llevar y disfrutar de cosas más mundanas. Hace unas semanas experimentamos algo de esto último: fuimos a ver una exposición itinerante para niños que se llama Grossology (algo así como la ciencia de lo asqueroso). Ya sabéis que aquí todo lo que sea educativo lo hacen muy sensorial, porque se aprende viendo, oyendo, tocando, oliendo...

En la foto de arriba tenéis un cartel que explica la formación de la m... de las heces sólidas -y creedme, había algo más que cartel. Había otro puesto en el que explicaban cómo se generan los olores en las distintas partes del cuerpo. Después tenías que oler unas botellas y tratar de acertar si era olor de pies, sobaquillo, boca ... o culo.


El muñeco de la foto de abajo enseñaba cómo se generan los gases que crean los eructos. Podías darle de beber hasta que se tiraba uno.

Y así muchas más cosas: podías simular lo que pasa en nuestro estómago cuando vomitamos, cómo se forman los mocos o podías meterle pelotas a una nariz gigante con un cañón. En fin, una guarrada, pero lo pasamos como enanos.

martes, 2 de noviembre de 2010

Elecciones cañeras

Hoy es 2 de noviembre y acaban de cerrar los colegios electorales por estos lares. Este año se renuevan todos los escaños de la cámara de representantes, 37 senadores y 38 gobernadores (no creáis que estoy muy al tanto, acabo de mirar estos datos).
Lo que más nos llamó la atención durante la campaña electoral fueron los anuncios televisivos en los que los tipos/as se decían de todo menos bonito los unos a los otros. Por supuesto, al cabo de una semana, contraatacaban intentando desmentir lo que unos días antes habían dicho de ellos los rivales políticos de turno. Aquí os dejamos alguno de estos anuncios que pululan por internet, aunque la verdad es que los más bestias no los encontramos. Para que sean más divertidos, intentad imaginad las caras de Zapatero y Rajoy

Este es de una aspirante a senadora llamada Marla Wilson tirando con bala al senador Syverson:



Y finalmente, para que apreciéis la creciente importancia del español por estas tierras, aquí está el señor Mark Kirk chapurreando no se qué de su abuelita: