Eso será lo que les diré a mis alumnos mañana cuando cambiemos los libros por los balones. Este año voy a ser el entrenador del equipo de fútbol (aquí más conocido por soccer) de Barbour. Me apetecía mucho la experiencia, por aquello de que es un país distinto y esas cosas. Lo curioso es que aquí los deportes, y no sólo los escolares, van por épocas. Ahora está terminando el beisbol (que empezó ahí por febrero o marzo) y ya están con la pretemporada del fútbol americano, que como sabéis termina con la famosa Superbowl, el partido entre los mejores de las dos ligas gordas de por aquí.
Bueno, como os decía antes de enrollarme, mi temporada va a ser corta pero intensa: Si nos clasificáramos para la gran final del campeonato, terminaríamos el 6 de octubre, lo cual no es mucho si tenemos en cuenta que el primer partido es el 8 de septiembre.
Mañana empezamos con los tryouts, el proceso de selección de jugadores. Espero que no se presenten demasiados para no tener que hacer mucha criba. Lo que es probable es que tengamos que hacer dos equipos, el varsity (el de los mayores) y el junior varsity (el de los pequeños).
Bueno, prometo manteneros informados de estas nuevas andanzas deportivas. Por cierto, la foto es "de archivo", de cuando mi CD Lugo Alevín ganó la final de copa hace tres años.
Xa cho advertín, Flanagan: nunca debiches cruzar o Rock para ir ver á filla do boticario
jueves, 27 de agosto de 2009
domingo, 23 de agosto de 2009
Empieza la marcha
Pues eso, después de unos días de relax y adaptación, empezamos la batalla. Este año tenemos algunas novedades. La primera es que durante este primer mes somos una familia de cinco, ya que nos trajimos a nuestra prima María a pasar una temporadilla con nosotros por aquello de hacer oreja y practicar un poco el inglés oral. De momento está yendo de vez en cuando a casa de una de las vecinas, Laverne, para ayudarle, hacerle compañía y darle algo de conversación. El resto del tiempo lo pasa con nosotros, pero estamos intentando que conozca gente de su edad para hablar de cosas de adolescentes. Eso sí, si son chicos primero investigaré su expediente policial, así que vosotros tranquilos, Manolo y Amparo.
La otra novedad es que Marta ya tiene chollo. Un par de días antes de venir consiguió concertar un par de entrevistas en coles privados para el día siguiente a nuestra llegada y tuvo suerte de que la quisieran en los dos, así que tuvo que elegir (la verdad no tuvo que pensarlo mucho). Va a dar clase de español de 5º a 8º, así que podremos ayudarnos mutuamente. Yo este año conseguí quitarme un nivel de encima y voy a dar español en 6º y 8º.
La "temporada" empieza mañana, con un par de días de reuniones, y el miércoles nos sueltan a los miuras. Helena y Pedro empiezan mañana ya a saco. Supongo que les irá bien, aunque Pedriño estrena guardería al lado del cole de Helena, y eso de los cambios le cuesta un poco.
Por lo demás de momento no hay muchas novedades. Ya hemos visto a todos los colegas de por aquí y ya hemos conocido a casi todos los españoles nuevos de este año. La verdad, se hace un poco raro ser nosotros los que digamos las mismas cosas que nos decían el año pasado, pero bueno, son cosas de la edad.
Una última cosa, ya sé cómo configurar el teclado para escribir las "ñ" sin tener que copiar y pegar y también poner los acentos -gracias Manolón. A lo mejor es deformación profesional, pero me dolía leerme y no ver las tildes.
La otra novedad es que Marta ya tiene chollo. Un par de días antes de venir consiguió concertar un par de entrevistas en coles privados para el día siguiente a nuestra llegada y tuvo suerte de que la quisieran en los dos, así que tuvo que elegir (la verdad no tuvo que pensarlo mucho). Va a dar clase de español de 5º a 8º, así que podremos ayudarnos mutuamente. Yo este año conseguí quitarme un nivel de encima y voy a dar español en 6º y 8º.
La "temporada" empieza mañana, con un par de días de reuniones, y el miércoles nos sueltan a los miuras. Helena y Pedro empiezan mañana ya a saco. Supongo que les irá bien, aunque Pedriño estrena guardería al lado del cole de Helena, y eso de los cambios le cuesta un poco.
Por lo demás de momento no hay muchas novedades. Ya hemos visto a todos los colegas de por aquí y ya hemos conocido a casi todos los españoles nuevos de este año. La verdad, se hace un poco raro ser nosotros los que digamos las mismas cosas que nos decían el año pasado, pero bueno, son cosas de la edad.
Una última cosa, ya sé cómo configurar el teclado para escribir las "ñ" sin tener que copiar y pegar y también poner los acentos -gracias Manolón. A lo mejor es deformación profesional, pero me dolía leerme y no ver las tildes.
jueves, 13 de agosto de 2009
Las vacaciones siempre saben a poco (aunque sean de dos meses)
¡Hola a todos otra vez!
Empezamos aquí la nueva temporada del blog después de más de dos meses de vacaciones en casita, que es donde mejor se está.
La verdad es que mola que lo echen tanto de menos a uno. A pesar de que hoy en día la tecnología acerca mucho (gracias, señor Skype) todo el mundo estaba encantado de vernos en directo, especialmente a los niños. Bueno, algunos además estaban sorprendidos de lo que había engordado yo. Sin comentarios...
Y hablando de gorduras, nos pasamos casi todo el verano con comilonas de bienvenida y comilonas de despedida -con un breve lapso de unas semanitas en la playa-, acumulando memorias gastronómicas para luego no tener morriña de, entre otros, pan del bueno, chorizo, jamón, caldo gallego, marisco y pasteles. Y claro, entre bocado y bocado, entre sorbo y sorbo (especialmente cuando era de vino) contábamos una y mil veces las cosas que ya habíamos narrado aquí y sobre todo aquellas que por cuestión de discreción no mencionamos en este blog.
P.D.: para que quien quiera se ría un rato, cinco de las seis primeras veces que quise arrancar el hondita, me olvidé de pisar el embrague.
Empezamos aquí la nueva temporada del blog después de más de dos meses de vacaciones en casita, que es donde mejor se está.
La verdad es que mola que lo echen tanto de menos a uno. A pesar de que hoy en día la tecnología acerca mucho (gracias, señor Skype) todo el mundo estaba encantado de vernos en directo, especialmente a los niños. Bueno, algunos además estaban sorprendidos de lo que había engordado yo. Sin comentarios...
Y hablando de gorduras, nos pasamos casi todo el verano con comilonas de bienvenida y comilonas de despedida -con un breve lapso de unas semanitas en la playa-, acumulando memorias gastronómicas para luego no tener morriña de, entre otros, pan del bueno, chorizo, jamón, caldo gallego, marisco y pasteles. Y claro, entre bocado y bocado, entre sorbo y sorbo (especialmente cuando era de vino) contábamos una y mil veces las cosas que ya habíamos narrado aquí y sobre todo aquellas que por cuestión de discreción no mencionamos en este blog.
P.D.: para que quien quiera se ría un rato, cinco de las seis primeras veces que quise arrancar el hondita, me olvidé de pisar el embrague.
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